Reconozco que soy de las que deja el negro abandonado en verano. Será por eso que dicen de que atrae el calor, pero el caso es que es llegar el otoño y lo retomo con fuerza porque a mí los marrones y los beige no me hacen mucha justicia. Así que hoy os enseño el look con el que acudí ayer a Just Married Market. Es un look que ya habéis visto por aquí si hablamos de la combinación de camisa + jeans (podéis verlo aquí), pero quería enseñároslo de nuevo para remarcar lo que ya os comentaba en Instagram de lucir la maternidad cuando no nos vemos bien. Como os decía podéis ver que he engordado MUCHO. Se nota en brazos, en piernas, en cara... Y no pasa nada. Estoy trabajando en el cambio (obviamente no es una dieta estricta porque Martín está con lactancia completa), pero creo que es importante que no todas las imágenes que vemos en redes sociales sean las de las madres estupendas.
Camisa: Asos
Pantalón: Kiabi
Volviendo al modelito... se podría decir que es un look de básicos, pero el otoño pasado ya estaba embarazada y no me compré nada por el tema de la talla y éste aún no he empezado a gastar. Así que quizás sea un poco soso, pero nada que no se arregle con los complementos. En este caso, una pulsera de colores y unas sandalias acordonadas de Zara.
¿Vosotros habéis sacado ya el armario otoñal? Teníais ganas de que comenzara la temporada? Ayudad a esta blogger desconectada, ¿qué creéis que será un must imprescindible esta temporada?
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